La historia del Callao posee muchas y complejas redes que descubrir. Están en nuestro cotidiano andar, pasamos siempre por su lado y no nos damos cuenta. Los inmigrantes han conformado parte de nuestra idiosincrasia e identidad. Los chinos, por ejemplo, colonia fundamental de nuestro pasado, presente y de nuestro futuro. Los primeros habitantes de ojos rasgados llegaron al Callao, por primera vez, el 15 de Octubre de 1849, unos arribaron a tierras peruanas guiados por la esperanza de conquistar sus sueños en nuestro territorio, otros llegaron en calidad de peones para penosos trabajos en calidad de semi-esclavitud.
De los primeros grupos de chinos llegados al Perú, casi todos fueron reclutados en las zonas costeras de la provincia china de Guangdong. Estos campesinos, llevados primeros a Hong Kong o Macao, eran obligados a vivir hacinados en habitaciones sucias, en espera de “compradores” extranjeros. Una vez que un chino era escogido por el “comprador”, se firmaba un contrato, al principio era de cinco años y luego de ocho años. Estos contratos eran como una especie de autoventa, de modo que el chino se convertía en propiedad del “comprador” y así era revendido no se sabe cuantas veces.
Cuenta Jorge Basadre que “…a pesar de esfuerzos aislados, el porcentaje de mortalidad en la travesía era alto (se ha calculado que en algunos años pasó del 50%), y al llegar los cargamentos humanos al Callao, se producía una inspección oficial y a los que no tenían contrato, se les alineaba en la cubierta para ponerlos a disposición de los interesados; en los periódicos solían aparecer, además, avisos ofreciendo chinos…”.
Los primeros habitantes chinos al Perú, llegaron a bordo del barco danés Federico Guillermo, tras una difícil navegación de 120 días, arribaron al Callao. Levantando así el telón de la inmigración china en nuestro país. Los 25 años subsiguientes fueron el pico de esta inmigración y el puerto del Callao vio arribar a más de cien mil trabajadores chinos a través del Pacífico.
Han pasado ya 160 años desde la llegada de los primeros chinos al Callao, muchos se quedaron en nuestro primer puerto y desde allí fundaron familias y negocios. “Somos más de 2 millones de peruanos descendientes de chinos. Es la única colonia que tiene un barrio en el Perú y que ha creado toda una cultura culinaria”, explica Luis Yong, director cultural de la Asociación Peruano China.
El Perú es el país que tiene más chinos de toda America Latina. El poeta Juan de Arona escribió que en el Perú no había lugar donde no hubieran chinos y que no había trabajo que ellos no pudieran realizar.
¿Quien de los chalacos no se ha comido un pan con chicharrón en el Callao? ¿Quién no ha visitado alguno de esos “chifas chalacos” que aún existen en nuestro puerto? ¿Quién de nosotros no recuerda haberse comprado algo en “la bodega del chinito de la esquina”?
Desde aquí le rendimos un merecido homenaje y un humilde tributo a todos nuestros “paisanos chinitos” del Callao y del Perú.
PD.- En una próxima entrega escribiremos algo de quien ha sido uno de los mayores referentes teóricos de las Ciensas Sociales en el Perú. Emilio Choy Ma, un chalaco hijo de migrantes chinos, digno representante de la comuniad peruano china. Fue el primero en relacionar al marxismo con la antropología peruana y su obra es indispensable para el estudio de la historia, economía, antropología y sociología que se conozca en el medio. Fue amigo personal de Arguedas y profesor de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Lo más sorprendente y destacado de Choy es que solo pudo concluir hasta el segundo grado de secundaría. El hecho de haber sido autodidacta le confiere mayor merito.
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